Área arqueológica

Siguiendo el orden cronológico de inauguración tenemos: el Foro de César (46 a.C.), el Foro de Augusto (2 a.C.), el Templo de la Paz (75 d.C.), el Foro de Nerva o Transitorio (97 d.C.) y el Foro de Trajano (112-113 d.C.). Contemporáneamente a este último se inauguró de Foro de César reestructurado, al que se le añadió el complejo de edificios conocido como “Mercados de Trajano”.
Los Foros, realizados con las ingentes riquezas acumuladas en las guerras, tenían el carácter celebrativo y autorepresentativo de quienes los construían, que con sus respectivos gobiernos garantizaban la paz en Roma.
Para construirlos hubo que modificar la orografía y se sacrificaron viviendas y estructuras públicas, a veces sagradas. La inscripción grabada en la base de la Columna de Trajano recuerda la altura del mons arrasado para construir este foro. Cada complejo se proyectó en sintonía conceptual y física con los precedentes y se comunicaba con ellos mediante aberturas en los distintos lados.
Desde el punto de vista urbanístico y arquitectónico, los Foros son plazas monumentales porticadas con exedras, con un asentamiento axial centralizado, de forma cuadrangular, con dimensiones y orientaciones distintas dependiendo de los espacios y, también, de las estructuras preexistentes. El lado del fondo resultaba realzado por el templo consagrado a la divinidad protectora de cada emperador, cuya presencia se evocaba repetidamente mediante su presentación montada a caballo o en cuadriga, con inscripciones con su nombre y con referencias simbólicas iconográficas y ornamentales.
La función jurídico-administrativa se ejecutaba en las basílicas civiles, mientras que la connotación cultural se realizaba en las bibliotecas y las galerías de estatuas. El sistema arquitectónico, monumentalizado por las grandiosas dimensiones y el rico aparato decorativo y escultórico con mármoles de color, creó un modelo exportado después a las provincias romanas.